La contaminación atmosférica es la causante del 3% de las muertes en España

Uno de los últimos estudios publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y el Ministerio de Medio Ambiente, en relación a los datos sobre contaminación, afirman que alrededor de un 3% de la mortalidad anual en España es atribuible a la contaminación atmosférica.

Estos datos se reflejan en el hecho de que el 92% de la población mundial, incluido millones de niños, viven en zonas con niveles de contaminación atmosférica que superan los límites recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Esto se traduce en que casi nueve de cada diez personas en todo el mundo que vive en zonas urbanas respiran aire contaminado. Por ello, según esta organización, siete millones de personas mueren al año debido a la contaminación atmosférica, y la mitad de esas muertes están relacionadas con la calidad del aire dentro del hogar.

Esos datos nos hacen suponer que una de cada ocho muertes en el mundo están relacionadas con la contaminación, algo que supera las estimaciones hechas con anterioridad, y ratifica que la contaminación es el factor de riesgo medioambiental más importante del mundo.

En nuestro país, alrededor de un 35% de la población respira aire contaminado, lo que se traduce en unas 10.000 muertes al año relacionadas con la contaminación atmosférica. Según los expertos, el tabaquismo y la contaminación ambiental son dos factores muy importantes de riesgo para el desarrollo de múltiples enfermedades, sobre todo relacionadas con el ámbito respiratorio. Mientras que la contaminación causa unas 10.000 muertes al año, el tabaquismo unas 60.000. A pesar de la diferencia, los expertos recuerdan que una persona que no fume pero viva en contacto con aire contaminado, es equiparable a que fumase entre 5 y 10 cigarrillos diarios. La contaminación es la causa de desarrollo o empeoramiento de enfermedades respiratorias como el cáncer de pulmón, las neumonías, la EPOC o las infecciones respiratorias agudas.

Estos niveles de mortalidad cambian dependiendo de cada país, y la diferencia se nota especialmente entre los países del primer y tercer mundo. En los países en vías de desarrollo, se producen más defunciones por contaminación, al igual que en los países industrializados.

Los gases que influyen en el alto índice de mortalidad son muchos y diversos, como el nitrógeno, el ozono, las partículas en suspensión, el dióxido o el azufre. Estos gases están presentes en numerosas ciudades de nuestro país, especialmente Madrid y Barcelona. Por ello, es importante tomar consciencia de la necesidad de establecer medidas que disminuyan esos niveles de contaminación de manera que no afecte tanto a la salud de la población y se disminuyan el caso de muerte por intoxicación del aire.